Hoy no quiero hablar
ni contigo ni con nadie,
ni con la vecina que me mima..
ni siquiera con tu prima…
Hoy no es un hermoso día,
ese donde pueda perderme en tus palabras,
esas que saltan a viento en popa,
que suenan como una tropa
que se bate por tu ropa…
No es un buen día,
los ánimos están cansados,
la mente pidió vacaciones,
mi alma se relaja
buscando nociones escasas
detrás de la nostalgia
que todo lo espanta…
Cuando me hace falta
un poco de paz
no quiero hablar
ni contigo ni con tu vecina
que es una gran amiga
y que ¡está bien buena!,
al igual que tu prima,
esa que me mima
cuando tú te vas,
cruzando la esquina,
donde ella me arrima
para gozar de cosas
que contigo no puedo…
Y así se acaba esta historia
porque contigo yo no quiero hablar.
ni contigo ni con nadie,
ni con la vecina que me mima..
ni siquiera con tu prima…
Hoy no es un hermoso día,
ese donde pueda perderme en tus palabras,
esas que saltan a viento en popa,
que suenan como una tropa
que se bate por tu ropa…
No es un buen día,
los ánimos están cansados,
la mente pidió vacaciones,
mi alma se relaja
buscando nociones escasas
detrás de la nostalgia
que todo lo espanta…
Cuando me hace falta
un poco de paz
no quiero hablar
ni contigo ni con tu vecina
que es una gran amiga
y que ¡está bien buena!,
al igual que tu prima,
esa que me mima
cuando tú te vas,
cruzando la esquina,
donde ella me arrima
para gozar de cosas
que contigo no puedo…
Y así se acaba esta historia
porque contigo yo no quiero hablar.